La salud con enfoque de género

28 mayo, 2016 admin Novedades .

Son muchas las deudas pendientes que tienen los Estados a la hora de garantizar los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, tanto en Argentina como en el resto del Continente. En nuestro país, lo sucedido con Belén, la joven tucumana que fue condenada injustamente a ocho años de prisión tras sufrir un aborto espontáneo, puso nuevamente el tema en agenda, por lo menos por un tiempo. A diferencia de este caso, la mayoría de las situaciones cotidianas de maltrato, discriminación, violencia y vulneración de derechos que sufren las mujeres, adolescentes y niñas pasan desapercibidas para la opinión pública. Por eso, este 28 de mayo, en el que se conmemora el Día de Acción por la Salud de las Mujeres, es preciso recordar los avances y retrocesos que se han dado al respecto.D

Partimos de considerar a los derechos sexuales y reproductivos como la capacidad de todo ser humano de disfrutar una vida sexual satisfactoria sin riesgos de procrear si así se decide, libre de coerción y violencia. Lo cual supone romper con una visión tradicional y restringida en donde el enfoque se centraba en la fecundidad, asegurando el acceso a la información, a la prevención de enfermedades y proveyendo los servicios y medios necesarios para la totalidad de la población, sin discriminación.

En Argentina, se efectúan campañas de prevención de enfermedades y programas de anticoncepción, pero los mismos son insuficientes y con desigualdades marcadas en las distintas provincias. Las mujeres de Formosa y Jujuy tienen 16 y 14 veces más riesgo de morir que las mujeres que residen en la Ciudad de Buenos Aires por causas relacionadas con el embarazo, el parto y el puerperio.

En cuanto a uno de los objetivos propuesto en la Cumbre del Milenio del 2000, que era reducir la mortalidad materna en un 75% hacia 2015, podemos afirmar, a pesar de la falta de estadísticas oficiales, que la Argentina no lo ha cumplido.

Lo vivido por Belén en un hospital público de Tucumán demuestra que, si bien el aborto es legal en caso de violación o cuando la vida de la madre está en riesgo, en algunas provincias es de difícil acceso o directamente negado. A pesar de contar con un protocolo de atención para la interrupción legal del embarazo a nivel nacional y provincial, a muchas mujeres se les niega este derecho.

Por último, es fundamental detenernos en lo que hace a los embarazos y las maternidades infantiles forzadas, una de las problemáticas más invisibilizadas y, por ende, más desatendidas y negadas. El Informe CLADEM, de 2016, advierte que, al ser consecuencia de situaciones de violencia, constituyen una forma de tortura y ponen en riesgo la salud y la vida de miles de niñas menores de 14 años.

Por todo esto, debemos continuar luchando y trabajando desde los distintos niveles del Estado para que se garanticen los derechos relacionados a la salud sexual y reproductiva a las mujeres con un enfoque basado en los derechos humanos.