Una plaza llevará el nombre de la joven que se convirtió en símbolo de la lucha de por los derechos sexuales. El funcionario provincial Sergio Rojas, el concejal Alejandro Bustos y la diputada Gutiérrez fueron los responsables de la iniciativa.

A 11 años del fallecimiento de Ana María Acevedo, como consecuencia de que se le negara la realización de un aborto legal en el hospital Iturraspe de Santa Fe, la ciudad de Vera, de donde era oriunda, le pondrá su nombre a una plazoleta con el fin de rendirle un sentido homenaje. La joven madre, a la que se le había diagnosticado un cáncer en el maxilar en 2006, no recibió tratamiento de quimioterapia y rayos porque podía afectar el embrión. Su caso, que se convirtió en un hito en la lucha por los derechos sexuales y reproductivos, y que hoy se encuentra más que nunca presente en el debate que se lleva adelante en el Congreso sobre la interrupción legal del embarazo, merecía un reconocimiento público en su localidad natal.

La idea fue propuesta por la diputada provincial, Alicia Gutiérrez, al coordinador del Plan del Norte de la provincia, Sergio Rojas, quien se comunicó con el edil del Partido Justicialista, Alejandro Bustos, para viabilizar esta iniciativa. A través de la presentación de un proyecto en el Concejo Municipal de la ciudad, se concretó este reconocimiento que trasciende la distancia entre los diferentes partidos políticos y niveles del Estado. La plazoleta que llevará el nombre de la joven está ubicada en las calles Lisandro de la Torre y Urquiza.

“Nos da mucha alegría y satisfacción poder realizar este homenaje, no sólo es una forma de recordar a Ana María Acevedo, su historia y su padecimiento, culpa de profesionales que creyeron que podían incumplir la ley en nombre de creencias o convicciones personales, sino también reivindicar la lucha de su familia por justicia. Su madre, Norma Cuevas, ha llevado el nombre de su hija al Congreso para exigir que se apruebe la legalización del aborto: una deuda histórica de la democracia con las mujeres”, sostuvo la legisladora Gutiérrez.

Ana María tenía 20 años, era madre de tres niños y murió luego de un largo padecimiento, el 17 de mayo del 2007, un par de semanas después de que falleciera su bebé que nació por cesárea. La Justicia procesó, hasta el momento, a seis médicos por el caso. En 2015, la provincia reconoció la responsabilidad del Estado y le pidió disculpas públicas a la familia.